Violencia, energía y ambigüedad pictórica

Willem de Kooning, pionero del expresionismo abstracto, dejó una huella impactante en el arte. Su libertad creativa influyó en generaciones, trascendiendo barreras y desafiando convenciones hasta su final

3 min de lectura
Willem de Kooning en su estudio (1961). Fotografía de archivo.
Willem de Kooning en su estudio (1961). Fotografía de archivo.

Willem de Kooning nació en Rotterdam en 1904. Es junto con Jackson Pollock la figura más sobresaliente entre los pintores asociados al expresionismo abstracto. A los 23 años emigra a Estados Unidos y en 1939 se convierte en miembro de un grupo que pronto se conocerá como la escuela de Nueva York, caracterizada por una pintura en tonos grisáceos, rosados y verdes, combinando abstracciones y figuración tradicional de un modo alternativo.

En 1948 presenta su primera exposición individual. Alguna de sus obras genera una dura polémica no sólo entre un público escandalizado sino también entre los críticos y seguidores del arte rigurosamente abstracto. Violencia, energía y ambigüedad son las características básicas de su pintura, pero no se utilizan destructivamente sino que se activan como parte de la instauración de un orden estético, explotando las posibilidades expresivas del gesto y de la materia, experimentando con formas abiertas y dinámicas que sugieren el temperamento y la acción creativa propia.

La obra de Williem de Koonig influyó de manera decisiva en el movimiento denominado Pop Art, y en la década de los 50 su estilo es captado en Nueva York por jóvenes artistas que darán lugar posteriormente a una segunda generación de expresionistas abstractos. Su trayectoria artística se extiende hasta finales de los años ochenta y durante sus cincuenta años de trabajo continuado alternó la figuración y la abstracción. De Kooning se mantuvo siempre fiel a su espíritu independiente, lo que le otorgó la libertad de pintar desde sus célebres mujeres de los años cincuenta hasta las obras monumentales y de trazo violento en las que libremente conjuga figuración y abstracción.

Su último legado fue interpretado como la cura de su enfermedad, después de 25 años de dependencia alcohólica. A pesar de sus pérdidas de memoria producidas por el alzhéimer, aportó novedades a su obra. Los críticos encontraron paralelismos entre su trabajo y los últimos años de Matisse. Con una paleta más amplia, parecía haberse liberado al final de la tensión dramática de las producciones de los 70.

El pintor neerlandés, nacionalizado norteamericano, falleció el 19 de marzo de 1997. Su primera biografía, titulada “De Kooning: An American Master”, fue publicada por Knopf a finales de 2004. Sus autores, Mark Stevens y Annalyn Swan, recibieron el Premio Pulitzer por este trabajo.

¿Qué te ha parecido el contenido al que acabas de acceder?

En ORUBA consideramos la independencia editorial como el pilar sobre el que se construye el periodismo veraz e incorruptible. Cada artículo que publicamos tiene como objetivo proporcionarte información precisa y honesta, con la certeza de que tú eres la razón de nuestro proyecto informativo.

Hoy, queremos invitarte a formar parte de nuestro esfuerzo. Cada euro cuenta en nuestra misión de desafiar narrativas sesgadas y defender la integridad periodística. Desde tan sólo 1 euro, puedes unirte a esta causa.

Tu apoyo respalda nuestra evolución y envía un mensaje claro: la información sincera merece ser protegida y compartida sin obstáculos. ¡Únete a nosotros en esta misión!



PUBLICIDAD

Comentar la noticia

Your email address will not be published.