La ciudad de San Francisco se asienta sobre una de las principales grietas de la corteza terrestre, la falla de San Andrés: algo que provoca en sus habitantes sensaciones encontradas. San Francisco tiene un clima moderado, con veranos cálidos e inviernos fríos, pero sin temperaturas extremas.
Nos encontramos ante una metrópoli multicultural, extravagante, libérrima y hedonista en la que el viajero nunca podrá permanecer indiferente. Se trata de un lugar muy cinematográfico: Hollywood ha retratado una y mil veces sus tranvías, las empinadas calles, el imponente Golden Gate, la caótica Chinatown, la mítica isla de Alcatraz, su enorme bahía, sus elegantes mansiones vitorianas… Por su parte, Jack Kerouac y otros escritores de la generación beat avivaron para siempre el mito literario de la ciudad. El movimiento hippy de los sesenta y la comunidad gay hicieron bandera de San Francisco, dando un aire bohemio y libertario del que hoy ya sólo queda un recuerdo difuso.
El espíritu tenaz de sus habitantes ha sido puesto a prueba en multitud de ocasiones. En pocos años, levantaron de nuevo una ciudad destruida por un gran terremoto y devastada por varios incendios. Con la misma constancia superaron la profunda crisis económica de los años treinta y vencieron las oleadas de criminalidad que amenazaban la vida en las calles. En esta gran urbe conviven el conflictivo ambiente de los muelles, la comunidad gay más numerosa del mundo, artistas y errabundos llegados en la década de los años cincuenta del pasado siglo, miles de inmigrantes latinoamericanos…
Tras un período de recesión económica que se produjo a principios de los noventa, San Francisco experimentó una etapa de bonanza, reafirmándose como el centro económico y cultural de California. Uno de los motores de la economía de la zona es Silicon Valley, donde tienen su sede las compañías de telecomunicaciones más importantes del mundo. Otros sectores con gran presencia en San Francisco son los seguros, las finanzas y la banca. La calle Montgomery, situada en el centro de la ciudad, es conocida también como la Wall Street de la Costa Oeste. Cada año, recibe más de dieciséis millones de visitantes.
La oferta cultural es muy rica y se desarrolla, entre otros lugares, en el Center for the Arts (en Yerba Gardens) con festivales de danza, teatro, música, cine e instalaciones artísticas, en el San Francisco Museum of Modern Art y en el American Conservatory Theater.
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