Recuerda que la mierda siempre sale a flote

5 min de lectura
Jorge Javier Vázquez, icono de Telecinco, junto con su burro Fortunato. Fotografía de archivo.

No sé qué fue primero, si la denuncia de una concursante de Gran Hermano que presuntamente fue violada durante su estancia en el programa de telerrealidad —acusación que Telecinco dejó pasar sin ningún tipo de escrúpulos— o el hastío que los espectadores de la “cadena amiga” sienten desde hace tiempo por la constante telebasura con la que este canal nos azota día sí y día tanto en horario infantil como en el de máxima audiencia. Todo ello, ha hecho que el Grupo Mediaset haya replanteado su estrategia comercial viéndose obligado a cambiar su forma de confundir a los espectadores.

Algo debería explicar la empresa de matriz italiana propiedad de Silvio Berlusconi sobre estos acontecimientos; las audiencias de Telecinco se han visto muy afectadas por la situación, pretendiendo incluso los altos ejecutivos que en sus programas del corazón se realizaran cambios que no gustan a todos los membrillos que suelen acudir de contertulios y que reafirman sus argumentos elevando el tono de la voz.

Y no es que Antena 3, que según indican las encuestas ha sustituido en el corazón de la mayoría de televidentes a Telecinco, sea mejor, ni mucho menos, aunque es cierto que no acumula tanta inmundicia catódica como el canal que dirigió el inefable Paolo Vasile. Lo cierto es que el duopolio publicitario y programático ha hecho aborrecer a muchas personas de sensibilidad cultural mínima la presencia de la televisión privada en nuestro país.

Pero la mierda siempre sale a flote y la concursante que denunció haber sido violada insiste ante los tribunales en que se le repare judicialmente y ahí la directiva de Telecinco tiene muchas cosas que decir. Lo más seguro es que tenga que poner en orden su billetera para hacer frente a las posibles indemnizaciones que cualquier juez dicte por haberse hecho los suecos con la protesta de la joven, a la que por un mínimo decoro personal hay que atender y tomar en consideración.

La verdad es que Telecinco ha llevado al cénit de la popularidad a los personajes más casposos de la televisión española y algunos de ellos se han convertido en reyes del mambo o en princesas del pueblo merced a su participación en algunas de las cabeceras más absurdas de la parrilla de la casa. Si esto es el entretenimiento que ofrecen las televisiones privadas, que baje Dios y lo vea, aunque por otro lado no seamos tan puros porque muchos espectadores disfrutan revolcándose en el lodo que destilan algunos de estos programas.

No todos los ciudadanos tenemos los mismos criterios sobre lo que debe de ser una televisión como medio de información y entretenimiento, pero sería conveniente fijar unos mínimos que nos permitieran dirimir aquello que es saludable desde el punto de vista del ocio y aquello que es insano. No se trata de prohibir nada, porque eso sería contraproducente, pero quizás una indicación por parte de un comité de expertos sobre la calificación que se merece el programa de marras podría tener algún sentido, aunque reconozco que no es una idea demasiado madurada por mi parte.

Se abre un hilo de esperanza cuando uno empieza a advertir que los espectadores que se sientan frente al televisor para ver un programa tienen algo así como criterio racional y relegan en las audiencias aquellas cuestiones que no cultivan el espíritu y sí alientan el morbo del fango en el que se recrean. Espero que no sea flor de un día.

¿Qué te ha parecido el contenido al que acabas de acceder?

En ORUBA consideramos la independencia editorial como el pilar sobre el que se construye el periodismo veraz e incorruptible. Cada artículo que publicamos tiene como objetivo proporcionarte información precisa y honesta, con la certeza de que tú eres la razón de nuestro proyecto informativo.

Hoy, queremos invitarte a formar parte de nuestro esfuerzo. Cada euro cuenta en nuestra misión de desafiar narrativas sesgadas y defender la integridad periodística. Desde tan sólo 1 euro, puedes unirte a esta causa.

Tu apoyo respalda nuestra evolución y envía un mensaje claro: la información sincera merece ser protegida y compartida sin obstáculos. ¡Únete a nosotros en esta misión!



PUBLICIDAD

Comentar la noticia

Your email address will not be published.