
Perú es el tercer país más vulnerable al cambio climático y aunque su aportación a las emisiones globales no es significativa, ha asumido el compromiso de reducción de un 30% de sus emisiones de gases de efecto invernadero.
Según Patricia Melgar, directora del Fondo Mundial para la Naturaleza en el país andino, aunque se trata del territorio con mayor extensión amazónica, las emisiones por deforestación representan alrededor del 50% de las emisiones nacionales.
Melgar resalta que es urgente que el país en su conjunto asuma compromisos concretos y ambiciosos, no sólo para para lograr la conservación de la Amazonía sino también para garantizar el respeto a los derechos de sus habitantes.
Entre 2001 y 2016, se perdieron casi 2 millones de hectáreas de bosque; el equivalente en superficie al estado de Israel, con zonas afectadas por la minería ilegal como la región de Madre de Dios.
Por otro lado, la directora de WWF-Perú destaca ejemplos positivos como el reciente reconocimiento y titulación de derechos territoriales indígenas amazónicos que constituyen un paso esencial para la conservación de millones de hectáreas de bosque.
Patricia Melgar remarca además el compromiso de las autoridades gubernamentales con la mejora de las prácticas ambientales y aunque considera que el país aún enfrenta retos monumentales como la corrupción surge como una de las mayores oportunidades el reconocer la diversidad biológica y cultural como gran potencia.
Texto: EFEverde.