Esta no es la primera novela póstuma que leo; hace años experimenté algo similar con el vasto, fastuoso “2666” de Roberto Bolaño. Obras que saben a poco. Que se degustan y desgastan con la tensa calma, y la prisa contenida de saber que a cada página leída, se acaban. Pero no del mismo modo que se acaban dejá…
SEGUIR LEYENDO →Cada 24 de diciembre el mundo conmemora el nacimiento de un niño tan pobre que sus progenitores no encontraron más que un míser…
Seguir leyendo →No me gusta conducir. Ni me gusta el coche. Pero, sobre todo, no me gusta contaminar. Por otro lado, me encanta, y es lo único qu…
Seguir leyendo →Me he enterado de que Victoria Federica, hija de la infanta Elena, es una gran aficionada a la moda de lujo y… cómo no, a la f…
Seguir leyendo →Haciendo un repaso a los titulares de la prensa de hoy, descubro que el servicio de televisión en las habitaciones de los hospita…
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Seguir leyendo →La vez que recuerdo haber estado más cerca de perder por completo la cordura fue, hace algunos años, en una ocasión en la que l…
Seguir leyendo →Estaba esperanzado con que, con el cambio de gobierno y con la elección de nueva cúpula directiva de la RTVE, los servicios info…
Seguir leyendo →La represión se ha cebado históricamente con los hombres, pero la han sufrido con más crudeza las mujeres, que a lo largo del t…
Seguir leyendo →Llego a casa. Pongo la tele. Hablan de fútbol. Pero no. Desde Madrid, en todos los medios, se habla siempre de la politización d…
Seguir leyendo →Mientras el actor madrileño Willy Toledo es detenido por cagarse en mitologías, la tropa clerical se lo pasa de puta madre con s…
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